El ministro de Justicia y Seguridad porteño, Guillermo Montenegro, reiteró que el joven baleado el lunes pasado en La Boca, Lucas Cabello, tenía un arma, defendió a la Metropolitana, afirmó que en los tres años desde que se creó hay «un solo caso de exceso en la legítima defensa» y pidió «mayor equilibrio» al evaluar el desempeño de la fuerza, que tiene «6 policías muertos y 15 pibes huérfanos», pues «eso también es estadística».
«La información que yo tengo es que la Justicia dispuso que un policía de la Metropolitana esté de consigna en ese lugar por una situación de violencia en un conventillo, donde había un grupo de vecinos que amenazaba a otro», explicó en diálogo con la Rock & Pop.
El hecho ocurrió el 9 de este mes en Martín Rodríguez 559, donde «una de las personas que era víctima de las amenazas permanentes, le comenta al policía que uno de los agresores tenía un arma, el efectivo lo quiere identificar, esa persona extrae un arma y él le dispara», dijo el ministro aunque reconoció que hay versiones cruzadas y será el juez el encargado de establecer cómo sucedieron los hechos.
«Hay versiones, la que yo tengo es ésta. Vamos a dejar trabajar al juez para que pueda decidir qué es lo que ocurrió, porque yo fui juez y realidad hay una sola», sostuvo.
Montenegro ratificó también que en el inmueble «había un grupo de personas que atacaba una mujer, que tenía un botón antipánico», y por eso «había una custodia policial».
Al ser consultado sobre 28 casos de uso de fuerza por parte de efectivos de la Metropolitana con resultados letales, 6 de ellos denunciados como gatillo fácil, el funcionario respondió que «en un solo caso» tiene «certeza de exceso en la legítima defensa» y agregó: «estoy sorprendido de que no me pregunten por los muertos de la Policía Metropolitana»
«No estamos de acuerdo con el uso excesivo de la fuerza, pero me sorprende que de todos los policías que han muerto, nunca jamás nadie me preguntó», dijo.
Luego sostuvo que «hay que ser equilibrado para manejar datos, porque dentro de la policía (Metropolitana) hay 6.000 personas y hablar que toda una institución puede estar utilizando el gatillo fácil, es excesivo. Seis muertos, seis viudas, 15 pibes huérfanos: eso también es estadística», afirmó.
Carolina Vila, madre de Lucas Cabello, el joven de 20 años baleado, afirmó que en su casa «nunca hubo un arma, ni siquiera de juguete» y negó la versión del agente Ricardo Ayala, de 24 años, quien al ser indagado esta semana por el juez de instrucción en lo Criminal Osvaldo Rappa dijo que disparó para defenderse de una agresión y que pensó que Cabello estaba armado.
«No estaba armado, lo único que tenía eran los sandwiches que había ido a comprar. Dijo que mi hijo lo amenazó con un arma pero en mi casa no hubo nunca un arma, ni siquiera de juguete», manifestó Vila.
Los abogados de la familia Cabello, Gabriela Carpineti y Nahuel Berguier, abogados de la familia de Cabello, piden el procesamiento con prisión preventiva de Ayala, quien está detenido, y que el caso sea caratulado como tentativa de homicidio doblemente agravada por ser miembro de una fuerza de seguridad y por el estado de indefensión de la víctima.
Vecinos de La Boca reclamarán mañana a las 18 con una concentración en Almirante Brown y Villafañe (cinco esquinas) bajo la consigna «basta de gatillo fácil: ni un pibe menos»