Organizaciones sociales y sobrevivientes de trata de todo el país intercambiaron sus experiencias preventivas y de asistencia a víctimas en la primera reunión de este tipo del Comité de Lucha contra la Trata cuya titular Yanina Basílico se comprometió a trabajar para que se complete la reglamentación de la ley que castiga este delito.
«Como Estado nos debíamos este encuentro que resultó una rica experiencia en donde se pusieron en juego la diversidad de posturas políticas y partidarias, las ricas experiencias de campo y el conocimiento acabado de la realidad que las atraviesa», resumió Basílico
El salón Auditorio de la Jefatura de Gabinete nacional, de quien depende el ente, congregó a 70 dirigentes sociales y mujeres que atravesaron situaciones de trata llegadas desde Salta, Jujuy, Neuquén, Tierra del Fuego, Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos, provincia y Ciudad de Buenos Aires.
Las variadas realidades que presenta el delito fueron expuestas por quienes trabajan en áreas de frontera, en zonas portuarias, en territorios donde la trata y el narcotráfico comienzan a mostrar su estrecha relación, en provincias donde se intenta ‘legalizar’ la prostitución en sus legislaturas.
«Necesitamos que el Estado se haga cargo de las víctimas», fue uno de los reclamos coincidentes expuesto por una de las representantes de Madres Víctimas de la Trata.
Alika Kinán, sobreviviente del delito, que se convirtió en querellante contra sus explotadores y que, desde Tierra del Fuego, se convirtió en voz de sus pares aseguró que «hay que garantizar el inmediato acceso al derecho a la salud, justicia, trabajo y protección de las víctimas rescatadas».
«Para asistir a las víctimas es necesario presupuesto, y eso será posible cuando se termine de reglamentar la ley de trata», aportó la titular del Comité, que confirmó que hizo este pedido al Jefe de Gabinete, Marcos Peña, ya que este proceso también posibilitará que se conforme el Consejo Federal estipulado en la norma, donde se garantiza y legítima la participación de las ONGs.
Basílico también se comprometió a llevar las inquietudes que surgieron del encuentro a las representantes del área de trata de los ministerios de Justicia, Seguridad, Desarrollo Social y Trabajo, con quienes, por ley, el Comité debe coordinar acciones.
«Hay trata porque hay prostitución» fue la afirmación de Sonia Sánchez, también sobreviviente del sistema prostibulario, autora del libro ‘Ninguna mujer nace para puta’, al mostrar su descontento por la presencia de dos representantes de la asociación de meretrices que se reconocen como ‘trabajadoras sexuales’.
La diputada argentina ante el Parlamento del Mercosur (Parlasur), Fernanda Gil Lozano con amplia trayectoria en el tratamiento de la temática, recordó que Argentina «es abolicionista», anticipó que impulsará que «se homologuen las leyes de los países de la región en ese sentido» y que «es necesario lograr una Corte especial que juzque este delito sin fronteras».
El intercambio incluyó representantes de organizaciones de Naciones Unidas, del feminismo, de la iglesia católica, de juezas y de migrantes, entre otras.
«El Comité debe hacer lo que la ley dice que tiene que hacer. Pensemos y elaboremos estrategias conjuntas, Estado y sociedad civil, que se ajusten a la realidad de cada territorio», sugirió Basílico que se comprometió a recorrer las provincias y a crear una red para mantener el contacto entre las ONGs y dirigentes del sector.