Estudiantes, docentes y familias de la Escuela Normal Superior en Lenguas Vivas Nº 1 «Roque Sáenz Peña» de la Ciudad de Buenos Aires realizaron esta mañana un abrazo simbólico al establecimiento para pedir por seguridad educativa, ya que advirtieron que sienten «miedo» ante los «reiterados robos» ocurridos la semana pasada.
«Nos están robando el futuro»; «Necesitamos una escuela segura»; «Basta de robos en el normal»; «En estas condiciones no podemos estudiar»; «Escuela segura ya», fueron algunas de las consignas expresadas en carteles que desplegaron los integrantes de la comunidad educativa de la escuela ubicada en Avenida Córdoba 1951, en el barrio de Recoleta.
Con aplausos y al canto de «seguridad», familias, estudiantes y docentes se tomaron de las manos para dar inicio al abrazo simbólico que dio la vuelta manzana por la calle Riobamba hasta llegar a Paraguay y retornar por avenida Córdoba.
Tomás Reindick, delegado de los docentes del Normal 1, manifestó que no se sienten en condiciones de dar clases en el actual contexto de inseguridad: «No nos sentimos en condiciones de dar clases; no nos sentimos seguros nosotros ni los chicos».
Con respecto al abrazo, mencionó que surgió por parte de los docentes que se comunicaron con las familias el viernes pasado, y ellas se autoconvocaron para formar parte del acto ya que «necesitamos que nos cuiden».
Asimismo, la docente Noelia Espíndola advirtió que el problema de los robos no solo sucede en esa escuela: «Pasó en otros normales, es algo que pasa desapercibido y necesitamos que esto se termine».
En ese marco, se quejó porque la supervisión del Ministerio de Educación porteño no fue a verificar los daños pero sí «vino a controlar qué maestros hicieron paro el jueves».
«La inseguridad que nos da que entre cualquiera, que en el horario escolar desaparezcan cosas de la sala de maestros, de las aulas, habiendo menores circulando nos da miedo», puntualizó.
«Estamos acompañando a la escuela porque estamos hace mucho reclamando seguridad a la ministra (de Educación del distrito), Soledad Acuña», explicó Norma Rolandi, integrante de la cooperativa del colegio.
Detalló que sufrieron dos robos en el que se llevaron más de 70 tablets, comida de la cantina, una bicicleta de un profesor que «tiene valor no solo económico sino emocional y material didáctico del nivel primario.
«Sentimos que estamos desprotegidos, así que estamos acá para lograr más seguridad, para lograr una escuela inclusiva, con derechos para todes les chiques y porque somos defensoras de la educación pública siempre», hizo énfasis Rolandi.
En ese marco, agregó: «Al no haber seguridad se vulneran los derechos de los chicos a estudiar, los que hicieron esto hicieron un desastre. A veces hasta pensamos que es una zona liberada. Necesitamos que la escuela sea más cuidada».
Según informaron en un comunicado, la semana pasada se llevaron 122 netbooks, más de 80 tablets, computadoras, proyectores, micrófonos, cámaras, mercadería de la cantina, entre otras cosas.
Indicaron que los robos fueron en el Normal 1 y las escuelas con las que comparte edificio: Liceo 4 y Comercial Islas Malvinas, turno vespertino.
El jueves pasado, en el Normal 1 robaron 72 tablets del Plan Sarmiento (primaria); micrófonos, parlantes, una CPU y monitor (regencia de primaria); una CPU y un monitor (nivel inicial); mercadería y el efectivo (de la cantina).
«Estamos toda la comunidad educativa porque sufrimos dos robos dentro de la escuela, por eso pedimos seguridad y que nos cuiden», manifestó emocionada entre lágrimas Yeila Gómez, profesora del Normal 1.
Alejandro Paverini, papá de una alumna, se quejó porque -según indicó- «se modificaron los puntos de seguridad» desplegados por la Policía de la Ciudad y, «mientras antes había un policía cada 400 metros, ahora hay uno cada 800 metros».
«El vandalismo que hay en las escuelas es grande, y el Gobierno no hace nada para ‘transformar’. No sabés quién entra al colegio, qué deja y qué se hace. Se pide más hora de clases pero ¿con qué material van a estudiar los chicos si se las roban?. La seguridad no existe», indicó Paverini.
Marcelo Ríos, dirigente del gremio docente, señaló que la institución viene sufriendo reiterados robos y hechos de vandalismo: «La escuela no está exenta de lo que pasa en la ciudad. Acá no nos sentimos seguros ninguno, llegamos a las 6 de la mañana y no hay luz ni policía. Los días del robo las docentes ingresaron y se encontraron con un panorama desolador, todo roto y tirado en el piso y al otro día volver con el miedo de si quedó alguien adentro», expuso.
Luego de las denuncias aseguró que hubo un compromiso de mayor presencia policial pero entiende que debe haber «un mayor compromiso del Gobierno de la Ciudad en cuanto a la seguridad escolar, no solo para el Normal 1 sino para todas las instituciones educativas, porque nuestro caso no es una excepción sino que lamentablemente se está haciendo la regla».
Foto/fuente: Télam