Una reciente visita a la colonia de verano que funciona en el Parque de la Ciudad reveló que continúan las deficiencias, denunciadas a principios de enero, y que «muy pocas fueron las mejoras» tras el anterior relevamiento, a pocos días de concluir el servicio educativo, el próximo 1 de febrero, informó la defensora adjunta del Pueblo, Graciela Muñiz.
«El relevamiento contó esta vez con la presencia de un grupo de legisladores que corroboró la precariedad del lugar al que definieron como inadecuado para ser una colonia. Tener una pileta y un predio al aire libre no alcanza para funcionar como tal. A esa conclusión llegaron», dijo Muñiz en diálogo con Télam.
El recorrido, al que la Defensoría Adjunta del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires acudió en compañía de los legisladores Alejandro Bodart (MST-Proyecto Sur), Fabio Basteiro (Buenos Aires para Todos en Unidad Popular) y Rocío Sánchez Andía (Coalición Cívica-ARI) y representantes de las comunas 8, 9, 12 y 14, verificó que «no hubo cambios significativos».
La colonia, que funciona en el marco del programa «Vacaciones en la Escuela», dependiente del Ministerio de Educación porteño, ya recibió varias visitas en el curso de esta temporada.
Durante la visita, según el informe difundido hoy, «se pudo constatar que todavía no llegaron ni las gasas ni el Pervinox. Tampoco se recibió el tubo de oxígeno, el ambú (denominación con la que se conoce a un balón autoinflable provisto de mascarilla, para la asistencia respiratoria) y aspiradores».
Los legisladores «pudieron vivenciar el extenso recorrido de varias cuadras que los niños deben cubrir para llegar de los baños al comedor, lo que bajo el rayo del sol en pleno enero es insoportable», señaló la defensora adjunta.
La legisladora Sánchez Andía, que acompañó a la comisión, había expresado en ese momento que «ella misma se había sentido mal al cruzar tanta distancia, a pesar de que había llegado descansada y bien desayunada al parque para realizar la visita».
Otra de las observaciones que se hicieron en esta oportunidad fue la falta de accesibilidad para niños con discapacidad.
«No hay rampas y no se tiene en cuenta tampoco que asisten chicos de nivel inicial que deben subir y bajar diez escalones metálicos para ingresar al cinturón de agua que oficia de natatorio», dijo Muñiz.
Según el informe, después de la última denuncia realizada por la Defensoría los docentes manifestaron haber recibido material deportivo y didáctico y «comenzaron a cortar el pasto» en los últimos días.
Los legisladores coincidieron, al finalizar el relevamiento, que este parque no fue preparado para realizar una colonia para más de 3000 chicos.
«Existe una grave falla en la organización del programa que aparentemente no llevó adelante un mapa de riesgo y la posterior solución a los problemas de seguridad que detectamos», declaró Muñiz.