Una encuesta realizada por la Asociación Civil Inquilinos Agrupados concluyó que el 42% de los ingresos totales de una familia se destina al pago del alquiler de la vivienda.
Se trata de una encuesta realizada sobre una población de 5.000 porteños/as inquilinos/as, de donde se desprende que, en promedio, el 42% de los ingresos totales de una familia se destina a pagar el alquiler. Este porcentaje, es menor o mayor, según se trate de personas jóvenes, adultos mayores, madres solteras o hombres solos.
En las personas jóvenes el alquiler puede llegar a representar el 48% de su ingreso. En el caso de los adultos mayores, significa el 45% de sus haberes. Para las mujeres un alquiler representa el el 43% de su salario, mientras que para los hombres el el 38%.
Si tenemos en cuenta que una jubilación mínima ($14.068), apenas alcanza para cubrir el costo de alquiler de un monoambiente en la Ciudad. Se concluye que el costo de los alquileres en el territorio porteño resulta desproporcionado. «El metro cuadrado en la Ciudad, o sea el valor del suelo, es el más caro de la región. La vivienda está dolarizada: no solo aumenta en pesos, sino también en dólares. Y en la Ciudad tenemos una desregulación absoluta del mercado inmobiliario», señala Gervasio Muñóz, presidente de Inquilinos Agrupados.
«Los salarios aumentan una vez por año, en cambio los alquileres aumentan dos veces por año, en forma semestral”, reflexiona Muñóz y advierte que el valor promedio de alquiler de un monoambiente es de alrededor de 14 mil pesos, con lo que una tenemos que una jubilación mínima apenas alcanzaría a cubrir el alquiler, sin tener en cuenta otros gastos relativos a la vivienda. “Al monto del alquiler hay que sumar el valor las expensas que son muy difíciles de calcular porque cambian todos los meses», agrega.
La encuesta expone, expone también la informalidad con que se maneja el mercado inmobiliario en la Ciudad que, según Gervasio Muñóz, «facilita una fenomenal evasión impositiva de parte de los parte de los propietarios»: El 89% de los inquilinas o inquilinas no recibe una factura legal cuando paga el alquiler; el 54% recibe un comprobante no válido como factura; el 18% paga por depósito o transferencia y se queda con el comprobante que emite el banco y el 16% paga en efectivo y no recibe ningún comprobante. Solo el 11% obtiene una factura legal.