En un acto que resalta la rica cultura porteña, la Legislatura porteña declaró de Interés Cultural el proyecto ‘Bar de Viejes’. Iniciativa, que busca poner en valor los tradicionales bares que han sido testigos del cotidiano de los habitantes de la Ciudad de Buenos Aires.
Durante el acto, que se celebró en el salón Montevideo del palacio legislativo, tanto Matías Barroetaveña, legislador y autor de la declaración, Martina Sofía Alfuso, creadora de la iniciativa; la poeta Belén Nahuz; el licenciado en Diseño del Paisaje, Fabio Márquez; y el artista plástico Patricio Larrambebere, aportaron cada uno de ellos una visión particular sobre la importancia de los bares en la vida social y cultural de la Ciudad. Sin embargo, fue la intervención de Alfuso la que resonó con particular fuerza.
La importancia de los bares en la vida urbana fue subrayada por Alfuso, que expresó “Gracias a los bares, que siempre hacen que tenga un camino para volver a casa. En los bares, las personas nos encontramos para construir un mundo sin resultados; parece tonto, pero hoy en este mundo del algoritmo es revolucionario”. Esta reflexión nos lleva a entender los bares no solo como simples espacios de consumo, sino como lugares de encuentro donde se forjan relaciones, se comparten historias y se construyen memorias colectivas.
En este sentido, Alfuso definió estos lugares como el “espacio de la justa banalidad, de generalidades compartidas” y como un refugio para “personas sin plan, sin agenda y que repiten sistemáticamente la misma ceremonia”. Estas palabras capturan la esencia de lo que significa un bar en la cultura porteña: un hogar lejos del hogar, un refugio donde la rutina se encuentra con la espontaneidad, y donde lo trivial puede convertirse en lo profundamente significativo.
El proyecto ‘Bar de Viejes’ nace con el propósito de rescatar y valorar estos espacios que forman parte de la identidad cultural de la ciudad. Desde su creación hace más de cinco años, ha buscado no solo documentar, sino también potenciar la experiencia de ir al bar a través de diversas iniciativas comunicacionales. Esto incluye la realización de artículos, mapas interactivos, encuentros y actividades artísticas que fomentan una nueva topografía de Buenos Aires. En este nuevo mapa, los bares no son simples establecimientos, sino puntos de encuentro donde la historia y la identidad de la ciudad se entrelazan.
Además de su función cultural, ‘Bar de Viejes’ se convierte en un valioso aporte para la preservación y difusión del patrimonio gastronómico local. En un mundo donde las interacciones humanas pueden ser cada vez más despersonalizadas, este proyecto ofrece nuevas formas de habitar los espacios de café, revalorizando el arte de la conversación y la conexión humana. Así, se erige como una salvaguarda de parte de la historia de Buenos Aires, promoviendo no solo la memoria colectiva, sino también la creación de nuevas narrativas que abracen el arte, la cultura y la tradición.
En resumen, la declaración de Interés Cultural realizada por la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires al proyecto ‘Bar de Viejes’ es un reconocimiento de la importancia de estos espacios en la construcción del tejido social de la ciudad. A medida que avanzamos en un mundo cada vez más frenético y digitalizado, la iniciativa nos recuerda que los bares siguen siendo lugares relevantes donde se construyen realidades, se comparten risas y se forjan amistades. Por lo tanto, más que un simple reconocimiento, esta declaración es una invitación a redescubrir y valorar lo que se encuentra en la esencia de la vida urbana: la capacidad de conectarnos, de compartir y de vivir momentos significativos en el calor de un bar.