La jueza Andrea Danas, titular del Juzgado en lo Contencioso Administrativo y Tributario 9, dispuso habilitar la feria judicial en la ciudad de Buenos Aires para para convalidar la información pública que reclaman alumnos, padres y docentes, en tres procesos judiciales, sobre el controvertido programa Secundaria del Futuro que pretende implementar el Ejecutivo porteño a partir de este año.
Esta mañana, la magistrada, hizo lugar al pedido de la asesora tutelar Norma Beatríz Sas y habilitó la feria judicial para que el Ministerio Público Tutelar pueda acceder al expediente donde se tramita la implementación del programa “Secundaria del Futuro”, impulsado por el Gobierno de la Ciudad en forma inconsulta según denuncian los demandantes.
Vale recordar que, el 27 de diciembre pasado,la jueza de primera instancia Cecilia Molica Lourido, dispuso la constitución una Mesa de Trabajo con el objeto de que el Poder Ejecutivo porteño brinde la información a pedido de los asesores tutelares de la Cámara de Apelaciones en representación de padres, docentes y alumnos. Ese día se llevó a cabo la primer Mesa de trabajo. La misma no conformó ni a los defensores oficiales ni a los demandantes, pues el Poder Ejecutivo acompañó la copia del expediente administrativo dos días después de la citada la convocatoria y un día antes del comienzo de la feria judicial: el 29 de diciembre de 2017. Se trata del expediente administrativo Nº 2017-29403851-DGEDS, el cual fue iniciado por la cartera educativa el pasado 18 de diciembre -a raíz del amparo iniciado por los asesores tutelares con fecha 26 de septiembre de 2017-, y a los fines de convalidar la información pública que reclaman los alumnos, padres y docentes, en tres procesos judiciales.
«En virtud que resulta necesario establecer los tópicos de información pública que aún se encuentran pendientes, y que motivarán -en la primera quincena de febrero- la segunda reunión de la mesa de trabajo ordenada cautelarmente por la Cámara de Apelaciones», fue el fundamento que esgrimió la jueza Danas fundamentó para habilitar de la feria judicial. Medida que contó con dictamen favorable del fiscal Damián Corti.
¿De qué hablamos cuando hablamos de la Propuesta Secundaria del Futuro?
La propuesta Secundaria del Futuro se enmarca en el Plan Maestro a nivel nacional, cuyas bases han sido diseñadas por el Banco Mundial en el documento “Profesores excelentes. Cómo mejorar el aprendizaje en América Latina y el Caribe”. Este proyecto esboza la provincialización de la negociación salarial, dado que el sistema educativo argentino se halla descentralizado desde la década de los 90. El Gobierno anterior en lugar de centralizarlo, sancionó la ley 26.075 que establece que los acuerdos salariales deben realizarse a nivel nacional. Un paliativo que a nivel salarial es importante, pero no los es a nivel curricular.
El proyecto habla de formar “ciudadanos del siglo XXI”, de un “aprendizaje crítico y cooperativo”, de “aprendizajes significativos” y “sujetos autónomos”. También explicita que se pretende formar sujetos con capacidad de adaptación, flexibilidad y emprendedores. Todas estas consignas adquieren sentido o se enmarcan en el anhelo del ex ministro de Educación, Esteban Bullrich, cuando dijo que los argentinos debemos aprender a de ser felices en la incertidumbre.
El proyecto parte del supuesto de que la escuela actual no se produce aprendizajes significativos; que las clases se imparten únicamente de modo magistral, es decir unidireccional, donde los alumnos tienen un rol pasivo y que las materias son compartimentos estancos sin articulación. Estos supuestos revelan un claro desconocimiento de la escuela pública. La propuesta tampoco explica de qué forma se garantizará este Plan Maestro. Se intuye que su aplicación intentará flexibilizar la estructura escolar, en lugar de mejorar la calidad educativa.
Los lineamientos del Plan Maestro fueron armados desde el Ministerio de Educación porteño, sin que se conozca la identidad de sus autores. La única certeza es que quienes participan en el diseño desconocen la tarea docente, es más, éstos no participan ni participaron en el armado del proyecto, dado que el mismo parte de una realidad escolar imaginaria, que, para su puesta en marcha, necesita de infraestructura y acceso a servicios y tecnologías que las escuelas de la ciudad no están en condiciones de garantizar.
Tampoco se sabe cuál será el destino final de los docentes, si que dejarán de denominarse así, para pasar a ser “orientadores”, “facilitadores” o “tutores”. Por otra parte, el agrupamiento de materias por áreas y la división en clases teóricas y prácticas, cambiaría también la organización del trabajo. A esto viene a sumarse que la pretendida eliminación de los contenidos curriculares de quinto año anulará la necesidad de profesores. Con lo que tenemos que el Plan Maestro apunta a la desvalorización del rol docente.
Otra polémica abre el planteo que los estudiantes realicen prácticas en empresas en reemplazo de horas de clase. Al respecto la docente y pedagoga, Adriana Puiggrós, advirtió en una entrevista al diario Página/12 que: “Los estudiantes y los profesores son concebidos como posible mano de obra barata. ¿Se tratará de otro paso hacia la reforma laboral, para presionar a los trabajadores en blanco con una rebaja de salarios?”. No sorprendería que esta precarización y fragmentación de las discusiones paritarias por provincias tuviera el objetivo de quitar fuerza a la organización sindical y presionar salarios a la baja.
Las escuelas donde el Ejecutivo porteño pretende dar inicio a este proyecto de laboratorio este año son 19: el Colegio Nº 7 Juan Martín de Pueyrredón (San Telmo); las escuelas de Comercio Nº 22 Gustavo Adolfo Martínez Zuviría (Boedo) y nº 34 Monseñor Miguel de Andrea (Monserrat); las escuelas de Educación Media Nº 1 Rodolfo Walsh (Villa Pueyrredón) y Nº 5 Juan Manuel Fangio (Villa Riachuelo); el Liceo Nº 9 Santiago Derqui (Palermo); las técnicas Nº 10 Fray Luis Beltrán (Balvanera), Nº 12 Libertador Gral. José de San Martín (Recoleta), Nº 35 Ing. Eduardo Latzina (Villa Luro) y Nº 26 Confederación Suiza (Balvanera); los normales Nº 9 Domingo Faustino Sarmiento (Balvanera), Nº 10 Juan Bautista Alberdi (Belgrano), Nº 06 Vicente López y Planes (Palermo), Lenguas Vivas Sofía Broquen de Spangenberg (Palermo) y Lenguas Vivas Pte. Roque Sáenz Peña (Recoleta); los Institutos en Enseñanza Superior Juan B. Justo (Villa del Parque) y el de Lenguas Vivas Juan Ramón Fernández (Retiro) y las artísticas Cerámica N° 1 (Almagro) y Danza Prof. Nelly Ramicone (Parque Avellaneda). En tanto que para el periódo 2019 y 2021, se aplicará en 44 escuelas por año hasta llegar al total.