Adolfo Pérez Esquivel, el APDH y las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, realizaron una conferencia de prensa para denunciar «la situación que están viviendo los pueblos originarios»
En el texto que convocó a la prensa, los firmantes expresaron su «profundo malestar y repudio» ante «el inconcebible nivel de agresión e impunidad con que se mueven determinados sectores afines al poder en contra de esta comunidad Qom (La Primavera), que viene luchando por la recuperación de su espacio territorial».
«Nos solidarizamos con la comunidad y con la persona y familia de Félix Díaz, que vienen soportando violencia física y psicológica como una manera de quebrar la voluntad de lucha y pedido de justicia», dijeron los convocantes de la rueda de prensa y garantes del diálogo entre los Qom y el gobierno de Formosa.
El fin de semana pasado dos jóvenes de la comunidad La Primavera, Carlos Sosa y Abelardo Díaz, fueron atacados a golpes y heridos con arma blanca los jóvenes, este último hijo de Félix Díaz, el qarashe (cacique o líder) de esa comunidad aborigen formoseña.
Junto al premio Nobel de la Paz y titular del Serpaj, Pérez Esquivel, y el CELS, firmó el documento Amanda Asijak, de la Comunidad Potae Napocna Navogoh-La Primavera, a la que pertenece Félix Díaz.
También lo suscribieron Aldo Etchegoyen (APDH), Nora Cortiñas y Mirta Baravalle (de Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora), Pablo Pimentel (APDH-La Matanza), Veronica Huilipan (secretaria de pueblos originarios de la CTA liderada por Pablo Micheli), Resistencia Qom y la antropóloga Lorena Cardin.
Los firmantes recordaron una serie de hechos, comenzando por la represión de la policía formoseña a los qom de La Primavera en 2010, pasando por el acampe posterior en la 9 de julio y hasta conseguir que el el Gobierno nacional los atendiera. Sin embargo, nada ha cambiado desde entonces.
En el encuentro de esta mañana, que se llevó a cabo en la sede porteña de la Servicio de Paz y Justicia (Serpaj), de calle Piedras 730, se pidió al gobierno federal retomar la mesa de diálogo, y contó con la asistencia de Amanda, la esposa del jefe de la comunidad Qom Félix Díaz, quien expresó que sentía «mucho miedo» por lo que pudiera pasarle a su familia.
Pérez Esquivel, al abrir el encuentro, retomó las palabras de la relatoría de la ONU para cuestiones indígenas, que señaló «una preocupación por la falta de seguridad jurídica respecto de los derechos de las comunidades indígenas sobre sus tierras fundamentales».
El Obispo metodista y co-presidente de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH), Aldo Echegoyen, sostuvo que el ataque a los hijos Díaz es «una provocación del gobierno de Gildo Insfran» a la resolución de la Comisión Interamericana que pide la protección de la comunidad Qom. Afirmó, además, que no se puede desligar la problemática de los pueblos originarios con «el avance de la frontera sojera» ya que «esas tierras que en otros tiempos no tenían valor, hoy lo cobran por el gran precio de la soja»
Amanda Asijak, esposa de Félix Díaz, relató sus sensaciones al enterarse del ataque que sufrieran sus hijos hace pocos días: «lo que le pasa a un hijo es el dolor más grande para una madre, tengo mucho miedo». Luego de denunciar al gobierno provincial, sostuvo que se entristece al hablar telefónicamente con su esposo quien le manifestó tener «ganas de dejar la lucha».
La Madre de Plaza de Mayo Nora Cortiñas recordó que Félix Díaz fue electo por la comunidad indígena como representante y pidió a las autoridades gubernamentales provinciales y nacionales que sea reconocido como interlocutor. Y lamentó que se criminalice el reclamo por la tierra que realiza la comunidad y por el que pesan cuatro acusaciones penales sobre Díaz: «El silencio es doloroso y nos ofende», dijo. Tras lo cual se sumó al pedido al gobierno nacional para que vuelva a tomar injerencia en el asunto de los Qom.
Finalmente, se anunció que el 3, 4, y 5 de junio se realizará un congreso de pueblos originarios en Formosa «para abrazar la lucha de cada una de las comunidades» de la provincia del Norte del país.