En la sesión del 1 de noviembre, la Legislatura porteña sancionó la ley que regula el estacionamiento medido en la ciudad de Buenos Aires. A fines de 2019, el 45% de las “callecitas” porteñas tendrán estacionamiento regulado: se instalarán 86 mil parquímetros en todos barrios de la Ciudad.
Tras celebrarse las dos protocolares, obligatorias y nada vinculantes audiencias públicas, donde vecinos y vecinas rechazaron enérgicamente esta medida. El Parlamento porteño sancionó con 32 votos positivos del oficialismo y 24 negativos las modificaciones a la Ley 5.728 que regula la concesión de la prestación del Sistema de Estacionamiento Regulado. De este modo, el número de parquímetros pasará de los 4 mil actuales a un total de 86.768. Los mismos funcionarán los días hábiles de 8 a 20 y los sábados de 8 a 13. Con una salvedad: los vecinos podrán tramitar un permiso electrónico para estacionar de manera gratuita en las inmediaciones de su domicilio. También se reemplazaran las actuales tickeadoras por las denominadas “terminales multipropósito, multiespacio y autónomas”, que permitirán abonar el “servicio de estacionamiento mediado” a través del celular, al tiempo que renovar el estacionamiento mediante esta aplicación.
Cuando recaudar es prioridad
A partir del año que viene y por iniciativa del Jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, los vecinos porteños tendrán un parquímetro en la puerta de su domicilio, al tiempo que perderán miles de metros cuadrados de espacio verde, debido a la construcción de las once playas de acarreo que se erigirán en los barrios de Chacarita y Colegiales.
Si bien la iniciativa del Jefe de Gobierno porteño estuvo suspendida por la Justicia, este año, hallaron un original artilugio para avanzar con los parquímetros independientemente de la medida cautelar. El mismo fue aplaudido por la mayoría oficialista, que encuentra en esta iniciativa una manera de engordar las arcas fiscales en tiempos de campaña electoral y feroz ajuste económico.
En diciembre de 2016 la Legislatura había aprobado la ley que autorizaba la concesión del Sistema de Estacionamiento Regulado por el plazo de diez años, pero en junio pasado la Justicia declaró inconstitucional los artículos que autorizaban la privatización del sistema. También cuestionó inconstitucionalidad en la aprobación de esa ley.
El Ejecutivo porteño se vio obligado a enviar a la Legislatura un proyecto de modificación de la ley 5728, con el objetivo de lograr una mejor fluidez y un ordenamiento del tránsito en la Ciudad.
En todo estás vos
Desde 2001 que el contrato de concesión del acarreo de autos y el estacionamiento medido está vencido y prorrogado de forma transitoria. A pesar de estar obligado a hacerse cargo del servicio, el Ejecutivo porteño ha renovado permanentemente esta prórroga. Las empresas que operan las grúas, STO (Dakota S.A) y SEC (BRD Sacifi), facturan más de 18 millones de pesos cada una y pagan un canon de 100 mil pesos al Gobierno porteño. El costo del acarreo se incrementó en un 500 por ciento desde que el PRO administra la Ciudad de Buenos Aires, pero el canon que pagas las empresas se mantuvo constante. Según el Observatorio del Derecho a la Ciudad, cada empresa realiza entre diez y catorce mil acarreos mensuales, es decir que las grúas levantan hasta quinientos cincuenta autos por día, con lo que tenemos que en menos de nueve horas recuperan el costo del canon.
Excusas inútiles para negocios jugosos
El oficialismo argumenta que la implementación del estacionamiento ordenado se debe a las “malas prácticas” de los conductores que entorpecen el transito y afectan a la seguridad vial. Estas malas practicas se solucionarán pagando un costo altísimo para renovar la tecnología existente, incorporando las terminales multipropósito: «un servicio moderno, transparente y de calidad que se pone en practica a través de una aplicación del celular. La oposición, en cambio, considera que a partir de esta modalidad se incrementarán los acarreos y multas.
Más acarreo menos verde
El nuevo sistema de acarreo que implementará el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta, tendrá una cobertura total sobre la Ciudad de Buenos Aires, que se dividirá en cinco zonas donde operaran 11 playas de acarreo . Esto se traduce en la pérdida de más espacios verdes.